Si tener una marca fuera como tener un hijo, todo lo que va a rodear al niño o niña (desde el nombre hasta el color de su habitación pasando por el carrito o la guardería) equivaldría al branding. Estamos hablando del proceso de construcción de una marca, un proceso transversal. No se trata de poner un nombre, que nos hagan un logotipo y a volar.

Un acercamiento al concepto lo facilita la Asociación Española de Empresas de Branding: “(…) es la gestión inteligente, estratégica y creativa de todos aquellos elementos diferenciados de la identidad de una marca (tangibles o intangibles). Que contribuyen a la construcción de una promesa y de una experiencia de marca distintiva, relevante, completa y sostenible en el tiempo”.

Se trata, por tanto, el andamiaje que hay detrás de la creación de toda marca. Cuando una empresa decide trazar una estrategia de branding o externalizarla, el objetivo principal es el de extender la marca en el mercado, posicionarla y ubicarla en la mente de consumidores.

Decimos objetivo principal, pero es importante saber que detrás se ubica la definición de una propuesta de valor, la dotación de atributos y valores a la propia marca, la configuración de su personalidad, la generación de credibilidad y confianza, la diferenciación de la competencia… Un montón de cosas.

Tipos de Branding

• Personal branding: Tengo un amigo que tiene un par de denuncias por razones bastante absurdas (insultar a un árbitro y a un examinador). Él, sin embargo, es de las personas más brillantes que conozco. El problema viene cuando buscas su nombre en Google: lo primero que aparece son las dos denuncias. ¿Cómo lidiar con ello? Pues habría que establecer distintas fases, pero el proceso de conseguir un nombre en internet acorde a tu talento es el de personal branding (a pesar de que tiene muchas más vetas a analizar que este ejemplo).
• Branding corporativo: Según lo definen en el blog de semrush “El branding corporativo es el proceso de construcción de una marca reconocible con personalidad y que se recuerda por unos conceptos o ideas muy claras”. ¿Qué significa esto? Pues que es la forma más habitual, el relativo a las empresas.
• Employer branding: Este término, a diferencia quizás de los anteriores, es más común en el ámbito de los Recursos Humanos que en el de publicidad o marketing. Se puede definir como la marca de una empresa en su función de contratadora. ¿Resulta apetecible trabajar para x empresa? Eso significa que lo han hecho bien en employer branding.

Si quieres profundizar puedes hacerlo en nuestro post La importancia del branding.